Maestros y legisladores exigen estabilidad y transparencia en el sistema educativo

Con la participación de legisladores, docentes y representantes sindicales, inició el Foro para la Construcción del Nuevo Sistema para Maestras y Maestros, un espacio de consulta que busca mejorar las condiciones laborales del magisterio y definir las bases de un nuevo modelo educativo.
La senadora Guadalupe Murguía Gutiérrez, del Partido Acción Nacional, planteó la necesidad de revisar los procesos administrativos y laborales que afectan a los docentes. “El clamor de las maestras y los maestros es la eliminación del USICAMM. Además, es necesario reducir a un año el tiempo de espera para cambios de centro de trabajo y descentralizar los procesos de ascenso y promoción”, señaló.
Por su parte, el diputado Francisco Amadeo Espinosa Ramos, del Partido del Trabajo, hizo un llamado a fortalecer el reconocimiento a los docentes, a quienes describió como el pilar del sistema educativo. “Sin su trabajo diario, la educación no sería posible. Sin embargo, enfrentan condiciones precarias, bajos salarios y falta de capacitación continua. Debemos garantizarles formación en nuevas tecnologías para que no queden rezagados en un mundo en constante evolución”, destacó.
La diputada María Luisa Mendoza Mondragón, del Partido Verde Ecologista de México, subrayó la importancia de que el nuevo sistema garantice la progresividad en la carrera magisterial. “Los docentes necesitan estabilidad y oportunidades claras para crecer profesionalmente. La educación es un derecho fundamental, y un sistema laboral justo para los maestros es clave para garantizar su calidad”, afirmó.
El senador Luis Donaldo Colosio Riojas, de Movimiento Ciudadano, enfatizó que cualquier transformación educativa debe tener a las y los docentes en el centro. “Durante años, cada cambio en la política educativa ha traído incertidumbre y confusión. No podemos permitir que esta transición sea otro episodio de incertidumbre. El nuevo sistema debe basarse en principios de transparencia, equidad y reconocimiento real del esfuerzo docente”, afirmó.
En el foro, también se discutió la importancia de adoptar un enfoque de humanismo mexicano, que reconozca el papel de los maestros en la formación de ciudadanos con valores y compromiso social. Se resaltó que la Nueva Escuela Mexicana debe consolidarse con un enfoque inclusivo y equitativo, asegurando condiciones justas para los docentes y educación de calidad para los estudiantes.
Para ampliar la discusión, se anunciaron foros estatales en distintas entidades del país, donde maestros, sindicatos y legisladores podrán aportar propuestas y enriquecer el debate sobre el nuevo sistema. “Es fundamental escuchar todas las voces para diseñar un modelo que realmente dignifique la labor docente y transforme la educación en México”, concluyeron los participantes.