Inicio » ¡Unidos y organizados, venceremos!

¡Unidos y organizados, venceremos!

by Abelardo Carro Nava
151 Vistas
Maestros protestando con pancartas en defensa de sus derechos laborales.
Abelardo Carro Nava
Abelardo Carro Nava

A lo largo de estos días, desde el pulpito presidencial, de manera continua y reiterada, hasta el hartazgo se ha dicho que el problema de la ley del ISSSTE 2025 radicó en que no se había difundido o informado de manera adecuada, sobre su contenido y todos los beneficios que tenía y que, por tales razones, el magisterio de alguna forma estaba confundido. Palabras más, palabras menos, lo que esto quiere decir: ellos fueron los que no entendieron lo que se estaba planteado en los documentos; como si de verdad las maestras y los maestros no leyeran ni comprendieran lo que ahí estaba escrito.

Expresado este mensaje, repito, desde el pulpito presidencial, obviamente que en cascada se construyó una narrativa cuyo propósito fue más que evidente: hacer énfasis en que el gobierno jamás se equivocó al plantear una iniciativa de reforma que beneficiara a todos los trabajadores al servicio de estado, pero también, que la sociedad mirara a las maestras y maestros que se movilizaron a lo largo y ancho del territorio mexicano, de la misma forma en que se miraba cuando el periodo neoliberal, principalmente, el peñanietismo, atacaba y denostaba la lucha por la defensa de los derechos de los trabajadores de la educación. ¿Una 4T muy vintage? En fin.

Ante tales cuestiones, muchos medios de comunicación reaccionaron. Como parece obvio, los que son muy afines a “la transformación” publicaron sendas notas con encabezados escandalosos y cuyo mensaje hacia sus posibles lectores era el mismo que desde palacio nacional emanaba; otros, por el contrario, titularon sus notas haciendo énfasis en que el magisterio democrático había doblegado a la presidenta. Cosa curiosa, unos medios de comunicación más, se limitaron a cubrir la nota y a exponer lo que la coyuntura estaba arrojando, día a día. En cualesquiera de los casos, poquísimos de éstos pusieron atención en un elemento que fue el detonante de las movilizaciones en todo el país: la incapacidad del gobierno actual para dar continuidad al proyecto iniciado por el lobeobradorismo, cuya base se construyó a partir de la justicia que se les prometió a todas y todos los trabajadores de la educación, debido a la injusta aplicación de políticas neoliberales que atentaron contra sus derechos laborales y profesionales en años pasados.

Peor aún, al parecer, muy pocos de estos medios de comunicación, rescataron la promesa que la presidenta Sheinbaum le hizo al magisterio durante su campaña política rumbo a la presidencia, relacionada con echar para atrás la ley de pensiones de 1997 y de 2007 que se impusieron durante el régimen neoliberal y

cuyas repercusiones las vive el magisterio en todo el país en estos momentos: las afores y las cuentas individuales dan cuenta de ello, pero, para ser honesto: ¿qué beneficios reales han tenido éstas en cada uno de los trabajadores al servicio del estado, particularmente, de la educación?

Recuerdo que hace unos años se decía (tal y como ahora se dice) que dichas legislaciones permitirían brindar mejores esquemas de jubilación y pensión, pero, principalmente, un sistema de salud inmejorable y cuyo impacto lo sentirían las y los trabajadores y sus familias. Sin embargo, bien valdría la pena preguntarse: ¿las y los trabajadores y sus respectivas familias ya cuentan con ese sistema de salud digno tan prometido?, ¿las afores qué beneficios les han traído? o, las cuentas individuales, ¿de qué manera han mejorado la pensión y calidad de vida de quienes ya se han jubilado?

Baste con sentarse un ratito con un grupo de jubilados y pensionados para dialogar y saber que la realidad no es la misma que se palpa desde palacio nacional, porque, desafortunada y lamentablemente, el magisterio tiene un sistema de salud en pésimas condiciones, aunque hoy día su titular Martín Batres, diga lo contrario en los videos que hoy graba, cual influencer se cree, en la plataforma conocida como TikTok. De medicamentos mejor ni hablamos, si muchas veces en las farmacias de los hospitales ni paracetamol tienen o, peor aún, para que se realice una cirugía, los pacientes deben comprar los insumos necesarios para ello.

Quienes tienen un poquito de años encima en sus hombros, saben perfectamente de lo que estoy hablando. No han sido pocas veces en las que la historia se repite: 1. Un gobierno que dice preocuparse por la clase trabajadora y, dada esa preocupación, impulsa políticas (agresivas) que terminan por violentar los derechos de los trabajadores al servicio del estado. 2. Medios de comunicación vendidos y al servicio del poder en turno que tienden a denostar la lucha por los derechos laborales y profesionales. 3. Un sindicato a los pies del poder cual tapete en la entrada a cualquier recinto. 4. Movilizaciones que son injustamente comprendidas por la sociedad en general que, desafortunadamente no padece los estragos de esas políticas gubernamentales.

Hace unos días se escuchó con más fuerza que nunca en, prácticamente todo el país: ¡Gobierne quien gobierne, lo derechos se defienden!; y hay razón ello.

Un derecho, dado su carácter inalienable no se vende ni se compra, se defiende, se exige o se arrebata; una lección que probablemente en los pasillos del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) jamás podría abordarse, porque, indiscutiblemente, su “lucha”, es una lucha que ha colocado a ciertos personajes en, por ejemplo, el senado de la República o en la cámara de Diputados; en cualesquiera de los casos, ¿para qué requiere el magisterio de

ciertos líderes que solo buscan acrecentar sus malsanos intereses dejando desprotegida a su base trabajadora?

Bien haría el magisterio en pensar y repensar la realidad que está viviendo. Muchos, el día de mañana tendrán la imperiosa necesidad de acceder a servicios médicos de calidad o a una jubilación y pensión digna; por ello pienso, al igual que otros tantos maestros y maestras que la lucha es ahora o nunca.

También pienso, al igual que otros tantos maestros y maestras, que juntos y organizados se conseguirá el objetivo de esta lucha.

Bien reza la consigna: ¡Unidos y organizados, venceremos!

Facebook Comentarios

También te puede interesar

Contacto

Revista Aula. Revista de periodismo y análisis especializado en temas educativos que fortalece el debate de manera libre y plural.

Publicaciones destacadas

Suscríbete

Suscribirse para recibir noticias de Revista Aula