Dentro de nuestra frágil democracia, el movimiento de estudiantes que demanda la restitución de las becas de posgrado está creciendo y es razonable que así ocurra.
En primer lugar, porque los nuevos lineamientos del Sistema Nacional de Posgrados surgen de una ley de ciencia impugnada por distintos sectores de la comunidad científica. El gobierno de AMLO confundió sus atribuciones y se arrogó la capacidad de definir oficialmente qué es “prioritario” para el país en materia científica. Por eso, crearon la Junta Gubernamental, no “de Gobierno”, del Conahcyt.
Segundo, cuando a mitad de agosto pasado entraron en vigor los nuevos lineamientos del posgrado para asignar becas, cientos de estudiantes ya habían sido evaluados con otros criterios, seleccionados y algunos habían iniciando sus estudios en varias universidades del país. La aplicación retroactiva de las nuevas reglas de posgrado por parte del Conahcyt canceló el derecho de estos jóvenes de estudiar. Fue algo totalmente arbitrario.
Tercero, por ahorrarse unos pesos para destinarlos a las obras faraónicas del presidente, este gobierno está comprometiendo miles de trayectorias estudiantiles y el futuro científico del país. ¿Cuál “humanismo mexicano”? ¿Es de izquierda un gobierno que propone aumentar, para 2024, el gasto en defensa en más de 100 por ciento y uno y cero por ciento para educación y ciencia, respectivamente? El Proyecto del Presupuesto de Egresos de la Federación revela las prioridades del líder, no las necesidades del país.
Además, la matrícula del posgrado escolarizado ha disminuido desde el ciclo escolar 2018-2019 al 2022-2023, según el Quinto Informe de Gobierno. Aunque el descenso es relativamente pequeño (2%), vale la pena preguntarse por qué ha ocurrido esto si, como afirma Ana García Vilchis, conductora de la sección “Quién es quién en las mentiras”, “hay más presupuesto para becas que antes”. Aumentó, según ella y Conahcyt, 40 por ciento con respecto a 2017 (06/09/23 www.gob.mx).
Que las protestas estudiantiles del 5 de septiembre frente al edificio de Conahcyt hayan sido retomadas en la Mañanera habla de la capacidad de movilización y de la necesidad de atajarla con, curiosamente, más mentiras y tergiversaciones. En su fact-checking, el portal Animal Político aclara que el supuesto incremento del presupuesto que presentaron en la Mañanera se refiere al monto “autorizado”, no al ejercido. Si se toma en cuenta este último, no hay tal aumento, sino un decremento de casi 13% en seis años https://animalpolitico ¿Qué tal? El Conahcyt, un órgano orientado a promover la ciencia, miente.
Pero no sólo eso. A medida que la inconformidad crece, el gobierno de AMLO también empieza a subestimar la capacidad de agencia que las y los jóvenes poseen para demandar sus derechos. Vilchis, por ejemplo, instó a los “alumnos” de posgrado a “informarse y a no dejarse llevar por la desinformación, por la manipulación”. Ella sólo repitió algunas partes del Comunidado 421 del Conahcyt de un día anterior que culpa a “intereses partidistas contrarios al gobierno” durante las protestas del 5 de septiembre.
Conformado por jóvenes “apartidistas” de 13 entidades federativas y afectados por los nuevos lineamientos del Conahcyt, el Frente Nacional de Estudiantes de Posgrado continuará sus movilizaciones hasta que encuentren cabal resolución a su pliego petitorio. Todo ello en álgido ambiente político-electoral. Mientras los estudiantes alzan la voz, el Conahcyt usa la h muda.