Así, el derecho a la práctica de criticar exige de quien lo asume el cumplimiento minucioso de ciertos deberes que, si no son observados, restan validez y eficacia a la …
@2022 – Designed and Developed by Xalapasoft
Por mi origen profesional como arquitecto tengo muy claro que los seres humanos, sobre todo a partir de la modernidad, hemos reducido el concepto de habitar a la construcción de casas, edificios y gigantescas urbanizaciones donde algunos millones de seres humanos -porque otros no tienen ni siquiera el acceso a una casa- llevan a cabo sus tareas cotidianas para sobrevivir.
Tal vez necesitamos recuperar ese arte tan humano que es la lentitud. Nuestros estilos de vida parecen contaminados irremediablemente por una presión que escapa a nuestro control; no hay tiempo que perder; queremos alcanzar las metas lo más rápidamente posible
Como mi trabajo es esencialmente la formación de educadores como profesionales de la esperanza que se incorporarán o ya están en funciones en el sistema escolarizado en todos los niveles y la investigación en ese ámbito, este espacio semanal se enfoca regularmente a proponer temas de reflexión en ese ámbito de la educación formal.
Aunque reformado en 1993, en el artículo tercero constitucional, que plantea el marco jurídico fundamental en materia educativa en nuestro país, prevalece el criterio -resabio de la influencia positivista de su origen- de que la educación se basará en “el progreso científico” y “luchará contra la ignorancia y sus efectos” que señala son las servidumbres, los fanatismos y los prejuicios.
Tal vez la parte más difícil, o al menos igualmente difícil que el escribir para hacer realidad esta entrega semanal, sea la elección del tema a desarrollar.
La educación también tiene un impacto significativo en la política. Una sociedad educada y crítica es fundamental para el funcionamiento de un sistema democrático. La educación proporciona a las personas las herramientas necesarias para comprender los problemas sociales, analizar propuestas políticas y participar activamente en el debate público.
Como muchos ciudadanos de este país saben, en las semanas recientes se publicaron los resultados de la prueba PISA, aplicada por la OCDE en el año 2022 en lugar del 2021 que era el año que correspondía, debido a la situación de confinamiento provocada por la pandemia.
Además de algunos maestros grillos -todos conocemos algunos- que desgastan su tiempo, su quehacer y su carrera en buscar a como dé lugar cierto poder, ingreso extra y prestigio ante sus jefes y las autoridades para irse acomodando y comúnmente creen
Hace un tiempo, mi estimado amigo y gran investigador de política educativa Pedro Flores Crespo dictó virtualmente, en un ciclo del Decanato de Artes y Humanidades de la UPAEP, una conferencia que tituló: ¿Cómo educa la cultura? Esa conferencia dio pie después a un artículo periodístico y más tarde a uno académico que se publicó en el número sobre Educación humanista de la Revista Latinoamericana de Estudios Educativos
Revista Aula. Revista de periodismo y análisis especializado en temas educativos que fortalece el debate de manera libre y plural.