Kitzia Dahe Ramos Rangel
El trabajo educativo en los primeros años es la base fundamental de la formación de los seres humanos, en este periodo germinan los ideales, principios, valores, conocimientos, el amor a la vida y al aprendizaje.
Desde educación prescolar, cultivamos sus inquietudes, resolvemos sus dudas, acompañamos sus miedos, los impulsamos a alcanzar sus sueños y fortalecer su desarrollo en el mundo a lo largo de toda su vida.
Por la importancia de este nivel educativo, las docentes y los docentes requieren de un registro, trascendente para tomar decisiones en el aula. Entre estas herramientas existe un instrumento indispensable, el Diario del docente que un registro anecdótico donde se expresa una narrativa docente sobre lo que ocurre en las sesiones.
El Diario del docente, también es un método de evaluación formativa que nos ayuda a “registrar aquellos datos que permitan reconstruir mentalmente la práctica y reflexionar sobre ella” e impulsar el desarrollo de los alumnos para que logren una constante construcción de conocimientos (SEP, 2012).
Pero también es importante agregar la noción de Miguel Ángel Zabalza (2011), donde expone que los Diarios de clase son mostrados como “documentos en que los profesores recogen sus impresiones sobre lo que va sucediendo en la clase”, por lo que deben contar con ciertos elementos útiles para la recolección funcional de diferentes datos, estos elementos se muestran a continuación:
Cabe mencionar que, su versatilidad y enfoque personal, nos permite utilizar materiales, imágenes, dibujos, transcripciones, códigos (colores, palabras, siglas), entre otros, para recordar y actuar en torno a aspectos relevantes que el Diario nos ayuda a identificar. De esta manera, antes de iniciar con la escritura de nuestro diario debemos identificar aspectos que nos ayuden a enriquecer el texto. Los principales aspectos utilizados a lo largo de la realización del diario fueron los siguientes:
Métodos visuales
Según Marcus Banks (2010) la creación de imágenes nos ayuda a documentar para posteriormente analizar diversos aspectos capturados en ellas. Por lo que se propone incluir bosquejos rápidos a lápiz, imágenes, ejemplos de las actividades o cualquier referencia a ellas como modelos a escala o impresiones, como se hace referencia en la Figura 1. Así, al realizar nuestro registro diario podremos analizar las condiciones de nuestro grupo y tener evidencias del trabajo.
Figura 1. Dibujos realizados a lo largo del diario
El diseñador gráfico y web Fernando Rodríguez Vico lo explica así: “El lenguaje verbal es menos de un 20% de la comunicación efectiva, lo que deja entrever la importancia del diseño, o lenguaje visual” (ESDIP, 2020). Sabiendo que la imagen tiene un gran impacto cuando se relaciona con el texto y que es esencial para transmitir cualquier mensaje, se propone usar la técnica de “scrapbooking” que nos ayuda a fortalecer los recuerdos, explorar, plasmar emociones y acontecimientos importantes por medio de fotografías colocadas de forma creativa. Como se muestra en la figura 2. En esta parte pueden ser de gran ayuda hojas de colores, dibujos y pies de figura que le den sentido a la imagen.
Figura 2. Ejemplo de un scrapbook
Códigos de color
Los códigos de color son una manera de clasificar los diferentes puntos de énfasis, nos ayudan a tener una mayor organización y encontrar de manera rápida los puntos importantes de acuerdo al tema que se busque abordar. Dentro del diario puede ser de gran ayuda tener cierto control de los colores que se utilizan, para que cada uno de ellos tenga un significado y sea más fácil identificar lo que se quiere encontrar dentro de él, tal como se muestra en la figura
Figura 4. Códigos de color utilizados en el diario
Del registro anecdótico a la narrativa docente
Una vez que se cuenta con los elementos necesarios para elaborar el Diario y teniendo claridad en los beneficios que tiene el relato dentro de la práctica docente, es inevitable preguntarnos de qué manera se puede enriquecer este instrumento para que no quede en un registro obsoleto, en producto de un simple trabajo por entregar y de qué manera estos elementos convierten al Diario en una herramienta esencial para construir mejores vías de acceso a la cultura escolar con una mirada investigadora.
María Bertely (2000) plantea la observación, como la puerta de entrada para conocer nuestras escuelas. Tomando su punto de vista referido a los criterios y características que estos registros ampliados deben tener, podemos sugerir que las propuestas ya mencionadas, si concretan una buena comunicación con el texto etnográfico que se produce, ayudarán a “ampliar las notas, recordar con precisión […] y realizar un registro amplio de lo observado y escuchado” a partir de imágenes, dibujos, colores y demás herramientas que resaltan los datos significativos para la delimitación de nuestro referente empírico, sin perder el sentido de nuestra investigación.
El registro anecdótico y la Nueva Escuela Mexicana (NEM)
Aunque ha sido un reto conocer y entender el cómo se integra esta propuesta curricular divulgada en el Anexo del Acuerdo 14/08/22, debemos resaltar que la NEM considera la multidisciplinariedad, interdisciplinariedad y transdisciplinariedad, como ejes organizadores de los proyectos. Como consignas que fusionan los campos formativos por medio de ejes articuladores, como un medio para abordar los problemas cotidianos, para que los alumnos enfrenten diferentes situaciones y retos cognitivos, con sus compañeros del aula, de la escuela y con agentes de la comunidad. Para lograr esto hay que considerar el programa sintético, que nos proporciona los elementos centrales para el trabajo docente, en este se concretan los contenidos y los Procesos de Desarrollo de Aprendizaje (PDA) según su nivel educativo.
El trabajo del docente es establecer qué actividades se pueden llevar a cabo tomando siempre en cuenta su contexto, evaluando si estas son posibles, viables y valiosas, por lo que se situará en una segunda etapa, en la elaboración del Programa Analítico donde el registro anecdótico del Diario entrará como una herramienta idónea para el “análisis sistemático tanto de las condiciones institucionales como del conjunto de experiencias docentes frente a los temas que se prescriben desarrollar” para cubrir el estudio del contexto socioeducativo, la puesta en marcha del programa sintético también se denomina como contextualización.
La Nueva Escuela Mexicana traza un modelo de integración curricular, desdisciplinarizado, que organiza procesos de desarrollo y aprendizaje, en función de un proyecto específico. El Diario es un dispositivo pedagógico que permitirá fortalecer la evaluación formativa, centrada más en la mejora que en el control; más atenta a los procesos que a los productos; una evaluación integral posible; que considere situaciones individuales y grupales, contextos institucionales y socioculturales; habrá de ser un proceso en el que participen todos los implicados (Illán y Molina, 2011).
El registro, es una narrativa que permitirá obtener información tanto de las acciones que generaron aprendizaje como de las carencias, dificultades y propuestas de trabajo que nos lleven a la mejora continua. Llevar un registro detallado de nuestro contexto educativo, sus actores y comportamientos nos ayudará a seguir los procesos de desarrollo y aprendizaje, su retroalimentación, establecer un diálogo en el proceso educativo y una autorreflexión de los logros, obstáculos y acciones de mejora.
Referencias
Banks, M. (2010). Los datos visuales en la Investigación Cualitativa. Ediciones Morata.
Bertely, M. (2000). Conociendo nuestras escuelas: un acercamiento etnográfico a la cultura escolar. Paidós.
Díaz-Barriga, F. & Hernández, G. (2002). Estrategias para la comprensión y producción de textos. McGraw-Hill.
ESDIP (2020). La comunicación visual: el primer impacto del mensaje. https://www.esdip.com/blog-escuela-de-arte/la-comunicacion-visual-el-primer-impacto-del-mensaje/
Folgueiras, P. (2009). Métodos y técnicas de recogida y análisis de información cualitativa. Universidad de Barcelona.
Illán, N. & Molina, J. (2011, jul-sept). Integración Curricular: respuesta al reto de educar en y desde la diversidad. En Educar em Revista, Curitiba (41). p. 17-40.
Ramos, K. D. (2021). Diario de observación. Material no publicado.
Secretaría de Educación Pública (2012). Las estrategias y los instrumentos de evaluación desde el enfoque formativo. SEP.
Ying, M. (2021). Scrapbook aesthetic ideas. [Figura]. Recuperado de https://www.pinterest.com.mx/pin/411868328427892488/
Zabalza, M. Á. (2011). Diarios de clase. Un instrumento de investigación y desarrollo profesional. Narcea.