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En el abandono: Centro de Educación Artística “Luis Spota Saavedra”

Alberto Sánchez Cervantes[1]

Los Centros de Educación Artística (Cedart) del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL) se establecieron en 1976 con el propósito de impartir bachillerato de arte. Entonces, se aspiraba a profesionalizar a los egresados de las escuelas de arte y a formar docentes de educación artística para los niveles elemental, medio y superior.

En 1981, un nuevo plan de estudios de cuatro años se centró en la formación de instructores de arte y amplió el estudio a los conocimientos científicos, filosóficos, sociales y pedagógicos. En la actualidad, los Cedart imparten el bachillerato en arte y humanidades con carácter propedéutico para que sus egresados continúen sus estudios de nivel superior en el área artística o en humanidades. Para ello, se exige a los alumnos rigor en sus estudios, vocación, disciplina y disposición total para cursar las asignaturas de ciencias exactas, experimentales y sociales, así como de humanidades, comunicación y arte.

El Cedart “Luis Spota Saavedra” se encuentra en un predio de 3 mil 946 metros cuadrados, ubicado en el número 16 de la calle Londres, colonia Juárez, Ciudad de México. Desde octubre de 2022, alumnos y padres de familia se han manifestado en la vía pública en demanda de instalaciones dignas, trasparencia y rendición de cuentas por las cuotas que pagan y freno al abuso de autoridad de parte de la dirección de la escuela y de algunos maestros.

Una madre de familia, que ha participado activamente en la organización de padres de familia y alumnos en defensa del Cedart, muestra fotos y videos que revelan el abandono en que se encuentra el plantel. Muladar es la primera palabra que viene a la mente con esas evidencias: pisos percudidos, mugre aferrada a muros y zoclos, goteras, techos con humedad, mobiliario desvencijado, losetas vinílicas desprendidas del piso, plafones destruidos y lavamanos que desahogan las aguas residuales en botes resquebrajados. Según el testimonio de alumnos, el agua de los lavabos sale con gusanos y hay cucarachas y roedores.

Entre lágrimas, una madre de familia expresa su pesar: «¿A dónde he estado mandando a mi hija?». Comenta que cuando padres y madres de familia hicieron un recorrido se encontraron una escuela con instalaciones insalubres, inhumanas e inseguras, totalmente olvidadas. Agrega que las instalaciones eléctricas e hidrosanitarias están en pésimas condiciones, que la cisterna no se ha lavado y los tinacos de agua son de asbesto (material que desde 1976 fue catalogado como cancerígeno).

La autoridad responsable de este centro educativo y la Secretaría de Cultura deben una explicación a padres y alumnos acerca de la falta de mantenimiento de la casa de Londres 16.

De acuerdo con el contrato de arrendamiento, número DRM/ ARREN/06/22, el INBAL paga de renta por el inmueble 12 millones 112 mil pesos anuales. En la segunda cláusula del contrato se estipula que la arrendadora se obliga a entregar el inmueble en condiciones adecuadas para su inmediata utilización y en estado de servir para el uso convenido [Centro de Educación Artística]. El estado físico del plantel evidencia que los servidores públicos del INBAL incurren en omisión de sus responsabilidades administrativas en perjuicio de la Hacienda Pública al realizar un pago millonario por un contrato que no cumple cabalmente con lo estipulado.

En la era de los derechos humanos, de los derechos de niñas, niños y adolescentes, del interés superior de la infancia y del trato digno y la no violencia contra las personas, existen escuelas con precariedades y pobreza impensadas en el siglo veintiuno. Los discursos oficiales a veces se topan con la amarga realidad, como la del Cedart “Luis Spota Saavedra”.

Referencias

  1.  Profesor de educación primaria. Periodista independiente, autor del gran reportaje Maestros bajo control. El caso de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE): Chiapas, Michoacán, Oaxaca (inédito).
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